Reneé G. Maddock

Información Básica

Nombres Completo:
Reneé Grace Maddock

Edad:
24 años

Nacionalidad:
Americana

Ocupación:
Camarera en un bar de la zona.

Raza:
Cazador de hombres lobo

Orientación sexual:
Bisexual

Descripción del personaje

Descripción física:
A primera vista puede parecer un hombre, si no fuera por sus curvas, y esos labios carnosos herencia de su madre. Su físico es perfecto, pero está claro que no le saca partido. No usa sus armas de mujer, más bien usa otro tipo de armas, por lo que desaprovecha mucho, o eso dirían algunos. Su mirada fría, inexpresiva, e intimidatoria, traspasa a cualquiera, y es lo más femenino que verás en ella, pues tiene unos orbes oscuros, grandes y redondos, bastante bonitos, y sensuales. Sus movimientos son muy bastos, masculinos. Pero tiene buenas curvas. Aunque no se vista de una forma muy femenina, muchas veces deja a más de uno con la boca abierta. Pues como no tiene ningún pudor, puede ir con unos shorts muy cortos, y una camiseta que enseñe casi todo, rasgada o de rejas, sin importarle lo que los otros piensen de ella. Sus facciones no son ni mucho menos las de una modelo, pero tampoco es horrible. Cuando ríe, o sonreí es preciosa, se le ilumina toda su cara, haciéndola angelical, pareciendo otra persona. Pero solo si es verdadero, si sonríe porque sí, tiene la misma cara de siempre. De chica mala, dirían.

Descripción psicológica:
Se puede ver a primera vista como es ella. O por lo menos deducirlo. Esa mirada fija, observadora, fría… signo de que es una mujer de armas tomar, que no se deja pisotear por nadie. Con un carácter altamente fuerte. Una mujer que se comporta como un tío. Es bruta, pasota, malhablada, pues suele decir muchas obscenidades. No es ni mucho menos coqueta, ni divertida, ni alegre, ni cariñosa o dulce. Todo lo contrario. No muestra sus sentimientos más ocultos, pero si rabia, rencor, odio hacía los que no piensan igual que ella, o sobretodo muestra ese lado violento, agresivo, con los lobos. Irónica con la gente, y sarcástica. No le importa decirte las verdades a la cara, en eso es bastante transparente. Bastante sincera, sí. Orgullosa al extremo, ella jamás te diré nunca que tienes la razón, a no ser que sea verdaderamente así, y le caigas bien. Celosa… bueno, si, puede ser. Pero también protectora, eso cuenta, ya que ella siempre va por libre. Es independiente, mucho. Y si alguna vez dependiera de alguien… entonces es porque algo gordo a pasado. Una persona que se atreve a todo, valiente. Desconfiada con las personas. Pues su lema es: Nunca confíes en nadie, solo confía en ti misma.

Pero tiene es normal que piense así, por todo lo que ha tenido que aguantar. Tal vez tenga su corazón por ahí, guardado en un baúl bajo llave, en algún sitio.

Aunque es cierto que las personas que han tocado su fibra sensible, han podido conocerla más o menos. Una mujer que tiene su lado bueno. No es que sea cariñosa al cien por cien, pero demuestra su afecto con alguna que otra sonrisa, o abrazo cuando dicha persona lo necesita. No es que los niños le gusten, pero es con los únicos –aunque no conozca- que se muestra medianamente cariñosa, o como queráis llamarlo.

Vida

Historia:
Nació en EE.UU. Junto con sus padres, en una pequeña granja a las afueras del pueblo en donde residían. Una familia muy mal avenida, por supuesto. Un padre maltratador por hobby, una madre sensible a todo, e incapaz de hacer nada. Reneé nació rodeada de gritos, dolor, angustia, odio, etc. Pero nunca de amor, paz o protección. Cosa que eso es lo que necesitaba una niña de apenas un año de edad, cuando comenzó todo. Poco a poco, la pequeña Reneé se daba cuenta de que eso parecía ser normal en nuestra sociedad. De que tu padre, tu propio padre, te pegara, te chillara, y te dijera mil obscenidades, escupiéndote a la cara. Nunca fue a la escuela, tal vez por eso sea así de bruta, y de mal hablada. No podían pagarse nada tampoco, y apenas había comida en la mesa, por lo que Reneé solía robar comida y demás cosas para poder sobrevivir.

Nunca jugaba con los niños del pueblo, simplemente porque no sabía relacionarse con nadie, y además porque nunca le decían nada. Era la niña rara de aquél lugar, lleno de cotillas. Con el tiempo se fue haciendo una persona muy suya… sin querer mantener relación con nadie, sin querer tener relación nada en general. Reneé solía irse al bosque, y practicar boxeo con sacos de pienso, de la granja en donde vivía. O jugar con la escopeta de su padre, una cosa que le fascinaba muchísimo, y que rápidamente aprendió a manejarla mucho mejor que su padre y que nadie del pueblo. A veces les gastaba jugarretas a la gente que se mofaba de su familia, o de ella.

El tiempo pasaba, y un día, a la edad de 16 años, vinieron de “visita” al pueblo, unos extranjeros, de Russia. Eran extrañamente raros. Y en eso se había fijado Reneé, mucho. Pues no paraba de observar todos sus movimientos {Ella de pequeña quería ser policía o espía}. En eso que una noche, hubo una masacre en el pueblo. Todos murieron, incluidos los padres de Reneé. Ella lo vio todo, todo. Y supo lo que realmente eran esa gente. Licántropos. Por suerte, a ella jamás la encontraron de su escondite. Pero le quedó un trauma para toda la vida. Aún, sigue soñando con esas pesadillas, de aquél día.

Al año, después de estar vagando por el país, sin rumbo fijo, decidió marchar de allí, e ir a buscar venganza. Así que se fue a Russia, con cuatro cosas, y todo el dinero que tenían sus padres por allí guardado. Se compró de todo. Y sobre todo su preciada Walter, que jamás se separa de ella. Oyó hablar de una tal hermandad, grupo, alianza, como queráis llamarlo, que se dedica a eso, a cazar licántropos.(Aunque ella vaya por libre siempre.) Su única obsesión, es cazar bichos de aquellos. Así que no se lo pensó dos veces, y cuando los encontró de unió a ellos.

Vive como una ciudadana más. En una de las habitaciones del bar/taberna donde ella trabaja, en una zona un tanto lúgubre. Pero lo que ella quiere es poder acabar con todos eso licántropos, que le arrebataron lo que más quería, aunque fuera en el fondo de su corazón, pero era lo que más quería en el mundo. Así que ahora busca venganza, y eso es lo que encontrara. Venganza.

Gustos:
El sexo.
El alcohol.
La velocidad.
Montar a caballo.
Las peleas.
Ver sufrir a los hombres lobo.
La lluvia.
Las armas.
Fumar

Disgustos:
Demasiados.

Manías:
~Observar a la gente.
~Sonreír de lado.
~Juguetear con su mechero de plata.

Fobias:
Sus pesadillas

Otros:
Lleva siempre encima su mechero de plata, al igual que una pequeña pistola con balas de plata.
Le gusta mucho cuidar de su caballo Storm.